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viernes, 7 de agosto de 2015

ANT-MAN: Un súper héroe en dosis pequeña

Scott Lang se viste de "Ant-Man" ... dentro de la ducha.

En los últimos años, la tendencia de los films de súper héroes ha sido colocar a los protagonistas ante amenazas con el potencial de destruir al mundo entero, algo que los héroes parecen ser capaces de superar con mayor facilidad a medida que se acumulan los villanos derrotados. Afortunadamente, "Ant-Man" no cuenta con este tipo de ambiciones. Tras doce películas en el creciente universo cinematográfico de Marvel, esta es una historia más íntima y, sí, más pequeña, que trae recuerdos del primer film de "Iron Man" en cuanto a su esencia como historia de origen. No por esto deja de haber un vínculo con el resto de los Vengadores, pero el guión es mucho más conciso que el de "Avengers: Age of Ultron", donde la mitad de la historia estaba dirigida a prepararnos para otras películas en lugar de brindar un arco dramático satisfactorio.

Paul Rudd y Michael Douglas en el set.
El proyecto de "Ant-Man" llevaba más de una década en desarrollo en las manos del escritor y director Edgar Wright, autor de los filmes de culto "Shaun of the Dead" y "Scott Pilgrim vs The World". Wright originalmente iba a dirigir el film y fue el responsable de escoger al elenco principal, pero poco antes de comenzar a filmar renunció a su cargo, citando "diferencias creativas" con Marvel. Su reemplazo fue Peyton Reed, quien tiene comedias como "Bring It On" en su currículum y re-escribió parte del guión junto a Paul Rudd. Es difícil saber qué tanto cambió entre una versión y otra, pero el film entretiene independientemente de dicho debate.

Rudd interpreta a Scott Lang, un experto ladrón recién salido de prisión que intenta poner su vida en orden para recuperar la custodia de su hija. Sin embargo, las habilidades de Scott no pasan desapercibidas para Hank Pym (Michael Douglas), el creador de un traje que permite reducir al tamaño de una hormiga a su portador. Previendo el peligro que este tipo de tecnología puede provocar en manos equivocadas, Hank decidió esconderla de S.H.I.E.L.D. hace un par de décadas, pero su ambicioso pupilo Darren Cross (Corey Stoll) parece estar a punto de hallar la fórmula de Hank y venderla a Hydra, la facción neonazi que destruyó a S.H.I.E.L.D. en "Captain America: The Winter Soldier".

"Así es cómo se golpea".
La misión de Scott es infiltrarse y destruir los laboratorios que albergan esta tecnología, para lo cual cuenta con el apoyo de Hope (Evangeline Lilly), la hija de Hank que trabaja como mano derecha de Cross. La relación entre Hope y su padre es bastante distante, pero ambos deben trabajar en conjunto para entrenar a Scott si desean que su plan funcione. La dinámica entre los tres personajes es lo mejor del guión: Douglas funge como figura paternal, biológica y figurativa, pero también aporta las explicaciones científicas al buen estilo del Dr. Emmett Brown; Lilly combina muy bien sus habilidades dramáticas con su destreza física, tal y como lo hiciera en "Lost", y su personaje evoluciona de forma intrigante para futuras cintas; por último, Rudd demuestra ser una buena escogencia, aunque atípica, para el rol protagónico, otorgando ligereza y humor muy adecuados para una historia que no se toma muy en serio a sí misma.

Aunque los trailers del film no lucían muy convincentes, las secuencias de acción están bien ejecutadas y los constantes cambios de tamaño de Scott permiten emplear un vistoso contraste de perspectivas, al tiempo que refrescan el panorama visual en cada encuentro. En este sentido, las hormigas que asisten a Scott también aportan una variedad llamativa que contribuyen a generar un gran sentido de aventura a lo largo de todo el film. Todos estos encuentros vienen también cargados de situaciones humorísticas, que aunque no siempre resultan hilarantes sí le brindan un encanto particular a toda la experiencia. En esta misma tónica, Michael Peña sorprende gratamente en un rol cómico como Luis, el amigo de Scott que intenta arrastrarlo de vuelta a sus malos hábitos.



No es un secreto que Marvel ha tenido poco éxito en desarrollar personajes antagónicos interesantes, y aunque Cross no le pisa los talones a Loki, su rivalidad con Hank le otorga suficiente peso para hacerlo resaltar como villano, aunque no deja de ser un tanto unidimensional, particularmente porque no conocemos nada sobre su vida más allá de su ambición por opacar a su antiguo mentor. Su confrontación con Scott ocurre en el lugar menos esperado, dando lugar a un desenlace divertido y apropiado con el tono del resto de la historia.

"Ant-Man" tenía todas las de perder gracias a su concepto caricaturesco y un nombre bastante ridículo, pero el film ha logrado infiltrar con éxito a un nuevo súper héroe dentro de la maquinaria que es este universo de películas. La autoría de este logro continuará bajo debate, pero la Fase 2 de Marvel cierra en una nota alta con esta entrega.

Puntuación: 4,25 de 5.


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